|

¿Uso de micrófonos para transformación de ondas sonoras?

Facebook
Twitter
LinkedIn
Telegram
WhatsApp
Email

¡Recomendaciones esenciales para no morir en el intento!

Una de las herramientas más importantes de todo cantante es el micrófono, pero usarlo de manera correcta pareciera una tarea difícil para muchos puesto que no importa si estás en un estudio de grabación o en un concierto, su uso apropiado requiere de tiempo y dedicación. Lo primero que deberíamos tener presente es que existen varios tipos de micrófonos, sin embargo, los más comunes por muchos de nosotros son los micrófonos dinámicos (cardioides) y los de condensador usados comúnmente en los estudios de grabación.

Según sea el tipo de micrófono que vayamos a usar, hay algunas recomendaciones que pueden ser útiles y que no requieren de mayor esfuerzo sino más bien de práctica y es por eso que hemos decidido compartirlas contigo a través de este post.

Los micrófonos dinámicos son generalmente cardioides (cardio, corazón) que se lo podría imaginar como una burbuja hacia delante de la cápsula, o supercardioides, que quiere decir que la captación es más estrecha, no capta tantos sonidos hacia los lados, su forma es apenas más oval (y lo que deja de captar en los costados lo compensa hacia atrás), y también en algunos casos, podremos encontrar hipercardioides, con un efecto un poco más acentuado que el ejemplo anterior.
Los condensers pueden tener estos dos patrones, pero además la variante omnidireccional donde recibe desde todos lados por igual, como por ejemplo para un coro cantando a su alrededor. También tienen la posibilidad de ser bidireccionales, o sea que toman sonido de los dos extremos, como en el caso de dos personas enfrentadas en un dúo.
Los micrófonos dinámicos cardioides, tienen un cierto rango de distancia que se puede regular para controlar el volumen, desde acercarlo hasta casi rozar la boca, hasta apenas alejarlo un máximo de unos 25 centímetros. Más allá de esa distancia, el micrófono generalmente ya no capta nada.

En el caso de los súper e hipercardioides, la distancia a la que se puede alejar es un poco mayor pero se requiere de mucho cuidado al girar la cabeza ya que enseguida dejan de captar lateralmente, aunque también se puede tomar como una ventaja al poder correr la cabeza en casos de tos, carraspera o en notas muy altas si sentimos que nos pueden fallar.

En cambio en el estudio de grabación, ante un micrófono de condensador, es probable que el ingeniero de grabación nos indique un lugar determinado donde debemos pararnos manteniendo una distancia constante y la única diferencia posible sería pararse con un pie mas adelante que el otro si fuera necesario, manejar el volumen muy sutilmente mediante un pequeño acercamiento o alejamiento balanceando el cuerpo. Más que eso no sería recomendable ya que estos micrófonos son mucho más sensibles y la diferencia en el nivel de la voz se volvería muy evidente.

Para no hacer mucho más largo este post, hemos querido compartir con ustedes este video de nuestros amigos de tecnoiglesia.com y esperamos que pueda ser de gran ayuda para todos.

¡Ayúdanos a seguir creando contenido gratuito y de calidad para todos!

¡Agradecemos muchísimo tu colaboración y esperamos poder seguir creando contenido de tu interés!

Publicaciones Similares

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *